7 cosas que hacer en Verona: Más allá del balcón de Julieta
Verona es una de las ciudades más especiales de Italia. Yo le tengo un poco más de cariño que a otras ciudades italianas (si cabe) porque estudié mi Erasmus aquí, lo que me dio la oportunidad de conocer bien gran parte de sus encantos. No es sólo una de las ciudades más románticas del mundo, o la ciudad de Romeo y Julieta; es una ciudad que esconde tantos rincones mágicos como os podáis imaginar. En este post no os voy a contar las cosas que hacer en Verona que ponen en cualquier libro (el balcón de Julieta, la Piazza Erbe, Piazza dei Signori, el Duomo, la Arena o Castelvecchio). Sino algunos de esos rincones que más me gustaron mientras viví allí.
Castel San Pietro
Pasado Ponte Pietra, en la calle Rigaste Redentore, se encuentra el Teatro Romano di Verona. Una vez llegamos allí, se encuentran unas escaleras, y arriba del todo, el Castel San Pietro. La belleza del castillo no reside en su interior, sino en su localización. Desde el parking de Castel San Pietro se contemplan sin duda las mejores vistas de Verona. Mi sugerencia es comprar una botella de vino y disfrutar del atardecer desde este punto de la ciudad.
Pizzeria da Salvatore
Comerse una pizza es una de las cosas ineludibles que hay que hacer en Verona. Pero no una cualquiera en cualquier sitio. Salvatore es la mejor pizza de la ciudad y ruta de peregrinaje para cualquiera que vino a visitarme mientras vivía en Verona. El sitio no es muy grande y por las noches se suele llenar (sobretodo los fines de semana), os aconsejo ir al menos una hora antes y reservar mesa. Podéis dar un paseo por la rivera del río mientras esperáis.
Gelateria Patagonia
Esta heladería está en pleno centro de Verona, en via S.Nicolo 43. Los helados aquí son auténticas bombas, el más popular es el baccio di Julietta; helado de chocolate y brownie con ferrero roché, no apto para intolerantes a grandes cantidades de azúcar claro está.
Iglesias
Seas católico o no, visitar las Iglesias son parte de las cosas que hacer en Verona. Hay más de veinte iglesias sólo en el centro de la ciudad. No es necesario visitar todas ellas pero si tenéis tiempo y veis una Iglesia no dudéis en entrar a dar una vuelta. Si sois católicos y vuestro propósito es entrar a rezar, lo podéis decir a la entrada y os dejan pasar gratis sin pagar la tasa de visita.
Aperitivi
El aperitivi es un básico de las cosas que hacer en Verona. Estamos en el norte de Italia, así que aquí se toma el Spritz, una mezcla de Aperol o Campari con proseco y agua con gas. Dependiendo del sitio donde se tome, a la hora de después del trabajo muchos bares ofrecen picoteo gratis. Mis sitios favoritos son en la Piazza Erbe y un elegante bar llamado Caffé Rialto que ofrece mucho más que aperitivi.
Porta dei Borsari
La Porta dei Borsari es una puerta romana del primer siglo después de Cristo. Está encajada entre dos edificios que no tienen mucho que ver con ella y eso la hace aún más especial. Para mí es una de las antigüedades más bonitas de la ciudad y sin duda algo que hay que visitar.
Café
Una de las cosas que más me llamaron la atención es la diferencia entre los italianos y los españoles a la hora de tomar café. En Italia no existe el concepto de ir a tomar un café y estar dos horas charlando, sino que el café se toma cual chupito de cafeína; un expresso y adiós. Caffè Borsari es una cafetería con dos mesas exactamente y un capuchino excepcional. Un café se puede tomar en todas partes pero en un sitio como éste sólo se puede en Verona.
Sirmione
Verona es una ciudad pequeña, posee muchísimas atracciones pero depende de los días que os quedéis os puede sobrar un día para ir a visitar el Lago di Garda. La mejor forma de llegar a él es yendo a Sirmione. Es un pequeño un pueblo con muchísimo encanto y rodeado del lago. Llegar a Sirmione desde Verona es muy fácil en transporte público ya que hay un bus directo desde Porta Nuova. El NL026 pasa cada treinta minutos por Porta Nuova y en una hora te deja en Sirmione. Si os apetece ver un sitio diferente y pasear un rato por un pueblecito con encanto o incluso un baño en verano, Sirmione os ofrece todas esas posibilidades. Además también tiene una heladería en el centro de las mejores que hay.
